La voluptuosa mujer que tanto amo

Autor: Oscar Perdomo Marín

   Caracas…¿Qué se hizo esa voluptuosa mujer que tanto amo? Aquí tengo amarillenta su partida de nacimiento española sobre tierra de indios. Busco a Caracas a los pies de su monte tutelar, pero también busco al rumoroso Guaire, el cristalino Catuche, el villorio bucólico que elogiara Alejandro de Humboldt, la Ciudad de los techos rojos, la mil veces violada urbe que parió a Bolívar y Miranda, la irredenta levantada de sus ruinas, tras el terremoto de 1812, la que apenas sobrevive en La Pastora y gime en su asediado casco colonial.

   Esa Caracas es un recuerdo. No más lágrimas ni añoranzas. Pese a todo, la memoria de la ciudad sobrevive por encima del caos y con esa memoria fragmentada espero encontrarla otra vez para alimentarla con el amor de sus hijos, vestirla, calzarla.

  Mi ciudad –nuestra ciudad- requiere una gran dosis de amor que borre la imagen de sus zapatos rotos: los huecos de las calles, la basura que la asedia, el crimen que la agobia, la polución que la contamina en su estrechez montañosa.

   ¿Qué se hizo la voluptuosa mujer que tanto amo? En el Siglo XXI la encuentro y cinco millones de amantes pueden restaurarla con el ropaje nuevo de los tiempos que corren.

  ¡Que crezcan y multipliquen los jardines! ¡Qué resurjan las fuentes! Es posible que las calles se revistan de asfalto nuevo  y se llenen de luz nuestros barrios. A mi Caracas la quiero limpia, alegre con sus parques repletos de gente, sin miedo.